lunes, 23 de julio de 2012

TIEMPO Y GASOLINA III: El desenlace

Fotograma de vídeo utilizando una onda
electromagnética. Hugo Martínez-Tormo. 2009
Estimada B.,

Gracias por haber señalado este anuncio. 

He  transferido sus comentarios nuestro responsable marketing y rogamos disculpe toda ofensa recibida. 

También me han avisado que vamos a trabajar con el departamento creativo y nuestras agencias de traducciones para que, en el futuro, este tipo de mensajes no aparezcan más en nuestros productos.

Le agradecemos su atención y quedamos a su disposición para cualquier información. 

Atentamente, 
 
C. K. 
Customer Service Specialist 





Ésta ha sido exactamente la respuesta que he recibido esta misma mañana en la bandeja de entrada de mi correo electrónico. Sé que es estúpido, pero me siento mejor. Sé que el departamento creativo pasará del tema -o tal vez no-, pero aún así algo se resquebraja. Muy poco, casi nada, pero cierto temblor me recuerda de qué están hechos los cimientos. Pesan, pero la fuerza de la gravedad los atrae igual que a cualquier otra cosa. No sé si servirá de mucho, pero lo que sí que sé es que el monstruo que nos devora se alimenta de nuestro silencio. Cada cosa que queremos decir y no decimos, cada apunte que queremos subrayar y que callamos, cada detalle o cuestión somera que dejamos pasar, es una pequeña muerte nutritiva para el monstruo, para el ávido heteropatriarcado. Con la voz, no lo mataremos de golpe, pero lo haremos pasar hambre, eso es seguro. 

1 comentario:

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